La igualdad de oportunidades

La igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres es otro de los principios básicos que deben estar implementados en todas las empresas, realicen o no políticas de Responsabilidad Social Empresarial.

En este ámbito, debemos destacar los dos tipos de discriminación existentes:

• Horizontal: son aquellos oficios y sectores en los que las mujeres difícilmente tienen presencia, pues socialmente dichas tareas están asociadas a los hombres.
• Vertical: se produce cuando las mujeres escasean en los puestos directivos.

En Galicia aun existen muchas empresas en las que existe discriminación, tanto horizontal como vertical, aunque en la última década, las instituciones han avanzado hacia un camino de difícil retorno, en el que cada vez la mujer tiene más presencia.

La Dirección Xeral de Traballo e Economía Social está muy implicada en este ámbito, el pasado mes de mayo aprobaba una orden con el objeto de establecer las bases reguladoras para la concesión de ayudas dirigidas al fomento e implantación de planes de igualdad, que eliminen la baja representación femenina en las empresas gallegas, y aseguren el derecho a la conciliación de la vida familiar y laboral.

Las medidas no se quedan ahí. Desde hace un par de años la Consellería de Traballo e Benestar otorga la Marca Galega de Excelencia en Igualdade, con el objetivo de reconocer a aquellas empresas que destaquen en la aplicación de políticas de igualdad. Uno de estos ejemplos es la Consultora de Ingeniería de Empresa (CIESA), que fue premiada en el año 2011, como entidad referente y ejemplo de buenas prácticas de Responsabilidad Social Empresarial en cuanto a igualdad.

El centro de PSA Peugeot Citroën de Vigo también es otra de las empresas pioneras en políticas de igualdad. Esta se ha convertido en uno de los ejes centrales de la política de la fábrica, que se enmarca dentro del plan “Desarrollo Responsable”. Además, han conformado una Comisión de Igualdad para gestionar las líneas de actuación y elaborar futuras políticas. Gracias a ello, han recibido la Certificación Europea de Igualdad Profesional.

No es necesario ser una gran empresa para aplicar políticas de igualdad, en una pequeña o mediana empresa es muy sencillo llevarlas a cabo y, a largo plazo, muy positivo para motivar a tus empleados y empleadas, así como mejorar su productividad. Estos son algunos ejemplos de cómo puedes hacerlo:

• Apoya a las trabajadoras embarazadas o en periodo de lactancia, de forma que quedarse encinta no suponga un problema laboral, sino que la empresa coopere al máximo ayudando a la empleada para que pueda conciliar su vida personal y laboral
• Proteger con especial ahínco a aquellas mujeres víctimas de violencia de género
• Elimina el “techo de cristal” que impide a las mujeres acceder a puestos directivos dentro de tu empresa. Debes olvidar la idea de que los directivos son siempre hombres
• A la hora de seleccionar un nuevo empleado o empleada, todos los candidatos  y candidatas deben tener las mismas oportunidades, sean hombres como mujeres
• Intenta implicar a los trabajadores y trabajadoras para que eliminen todo prejuicio sobre las mujeres. Son intolerables los comentarios machistas y el lenguaje sexista
• Garantiza que exista una igualdad salarial. Ante el mismo puesto de trabajo y las mismas funciones, una persona debe de cobrar lo mismo, independientemente de su género
• Toma medidas de conciliación familiar para que tanto hombres como mujeres puedan compatibilizar casa y trabajo. No debes dar por hecho que siempre será la mujer quien acompañe al niño o al abuelo al médico.

Desde RSE Xunta de Galicia te instamos a que tomes medidas para implantar la igualdad de oportunidades dentro de tu empresa. ¡Las personas se miden por su valía, no por su género!